Por: Carlos Mario
Marín Ossa
En días anteriores, se realizó en
la ciudad de Pereira, un conversatorio acerca de la situación que afronta hoy
el pueblo palestino, sometido a un genocidio por parte del Estado sionista de
Israel. El evento abordó el contexto desde la historia, la política, la
economía y lo ético – moral; porque en esta situación, hay que comprender muy bien
todas las aristas que han desarrollado este conflicto, los actores que en el
influyen y los intereses que están y han estado en juego.
El evento organizado por Opción
marxista internacional, contó con la participación de Alí Saleh Hussein Nofal, vocero
de la comunidad Colombo Paslestina, y quien desde hace décadas reside en
Bogotá, luego que llegara a estas tierras siguiendo los pasos de su abuelo y de
su hermano mayor, quienes echaron raíces en la capital colombiana como
comerciantes de la comunidad Árabe, Sirio Libanesa y Palestina.
Lo primero que hay que decir, es
que tanto el pueblo Árabe como el Judío son semitas, ya que hacen parte de los
pobladores de la península arábiga y su desierto en los tiempos de los imperios
Sumerio y Egipcio. Estos pueblos tenían lenguas familiares de una misma matriz
lingüística, y como pueblos nómadas se desplazaban a través del territorio.
Otra característica compartida, según Enrique Dussel, es que eran pueblos
pobres que se encontraban en medio de imperios poderosos, a los que más tarde
se le sumó el Romano, cuando conquistó el oriente próximo y tomó posesión de
las tierras cercanas al mar Mediterráneo. Varios pueblos semitas emparentados
con los Fenicios, comenzaron a desplazarse por el mar hacia las diferentes
riveras asiáticas y europeas, en busca de comercio y nuevos territorios para
vivir, otros pueblos permanecieron en el territorio, otros desaparecieron como
producto de la colonización imperial romana.
Luego de la caída del imperio
romano, y a través de los siglos, el pueblo árabe denominado palestino, se
encontraba en el territorio al norte de la Mesopotamia en la rivera con el
Mediterráneo y en las fronteras con África y Europa. Con el advenimiento del
imperio Otomano que dominó por más de seiscientos años (incluídas partes de
Europa y África), el pueblo Palestino estuvo bajo la égida Otomana (o Turca,
como también se le conoce). Pero en 1914, con el inicio de la primera guerra
mundial, el imperio Otomano tomó partido en favor del Imperio Alemán, de
Austria Hungría y del Reino de Bulgaria, quienes perdieron la guerra, ganando
Estados Unidos, Inglaterra, Francia, Italia y el Reino de Japón. Con la pérdida
de la guerra, el Imperio Otomano fue entregado a la administración francesa e
inglesa, quedando el territorio de Cisjordania y Gaza en manos del imperio
Inglés. Hacia 1923, oficialmente desapareció de forma oficial el Imperio
Otomano. Para entonces, el territorio estaba ampliamente desocupado en extensos
desiertos, y la población judía no superaba las 300 mil personas. En su
mayoría, el pueblo judío se había desplazado hacia Europa desde los tiempos del
Imperio Romano y más tarde hacia América. Bajo el mandato Británico de
Palestina, Inglaterra apoyó la creación de una patria judía en el territorio
palestino.
Alí Nofal, líder de la comunidad Colombo Palestina. Foto: Carlos Mario Marín Ossa |
Hay que entender que, el sionismo
es una política que además de apoderarse de un territorio ajeno para
entregárselo a personas con identidad religiosa y de intereses; es una política
de expansión violenta y a ultranza de un proyecto capitalista que se soporta en
el despojo.
En noviembre de 1947, unos pocos
países agrupados en la naciente Organización de las Naciones Unidas, votaron a
favor de la creación de un Estado judío en el territorio Palestino (que se
encontraba en poder de Inglaterra), y el 14 de mayo de 1948, el sionista David
Ben – Gurión proclamó la independencia de Israel en territorio palestino.
La colonización judía de las
tierras árabes palestinas, se ha dado a través de métodos violentos y de tierra
arrasada, matanzas y desplazamiento, que han configurado a su vez respuestas de
grupos y organizaciones Árabes de resistencia; algunas con métodos violentos
también, como Hamas; otras a través de la política y la diplomacia como la
Organización para la Liberación Palestina – OLP (hoy, Autoridad Palestina).
Los hechos más recientes, que
datan de octubre del año 2023, desencadenaron una ofensiva violenta de Hamas en
contra de ciudadanos judíos israelís; con una respuesta desproporcionada y
brutal por parte de régimen sionista de Benjamín Netahyahu, que deja más de
34.000 personas palestinas asesinadas en seis meses, alrededor de 13.000 niños
y niñas palestinas asesinadas y cerca de 9.000 mujeres palestinas asesinadas,
según cifras de la propia ONU.
Este 20 de mayo de 2024, el jefe
de fiscales de la Corte Penal Internacional, Karim Khan, solicitó orden de
arresto internacional inmediato en contra del Primer Ministro de Israel,
Benjamín Netanyahu por crímenes de guerra y contra la humanidad, debido a las
prácticas de exterminio como arma de guerra, empujar al hambre como arma de
guerra, la violencia sexual como arma de guerra, el secuestro y la tortura como
arma de guerra.
Solicitó además, orden de arresto
internacional contra el ministro de defensa de Israel y contra varios líderes
de Hamas.
P.D. Esperen en nuestra segunda
entrega, la entrevista con Alí Nofal.
Alí Nofal con Opción Marxista Internacional. Foto: Carlos Mario Marín Ossa |